¿Cómo sería el mundo si se prohibiera el uso del petróleo?

Por Leticia Rebeca Gasca. Muy probablemente habría menos guerras, seguramente viviríamos en un ambiente menos contaminado y definitivamente se desarrollarían de forma rápida tecnologías para aprovechar energías renovables.

Sin embargo, es más probable que dejemos de emplear el petróleo el día que se termine (recordemos que no es una fuente renovable de energía) que el día que esté prohibido.
Por ello, es importante reconocer la labor de un nuevo organismo dedicado a promover la adaptación y uso de energías renovables en el mundo. Se trata de la Agencia Internacional de Energía Renovable (IRENA), con base en Bonn, Alemania.

El objetivo, es reemplazar la dependencia global en las energías convencionales, como petróleo y carbón, con fuentes de energía renovable como el viento, el agua y el sol.

La idea de crear un organismo para promover las energías renovables surgió hace dos décadas en la Agencia Europea para las Energías Renovables (EUROSOLAR) y el Consejo Mundial para Energías Renovables (WCRE).

El proceso de creación de IRENA fue iniciado por el gobierno alemán, que, junto con España y Dinamarca, dirigen la fundación del organismo.

El principal reto es la gran inversión que se requiere para montar la infraestructura necesaria de tecnología renovable. De hecho, algunos críticos aseguran que sería más barato para el mundo pagar a los países en desarrollo para controlar la deforestación.